Felicidades, hermano,
en este día tan especial.
Lo mucho que tú me importas
hoy te quiero recordar.
Lágrimas y risas juntos,
de tristeza y felicidad,
bellos momentos que nunca
podré ni querré olvidar.
Eres mi mayor tesoro,
eres mi ángel guardián,
eres mi sol en invierno,
mi sustento, mi pilar.
Otro año de sonrisas
yo te vengo a desear
días de júbilo y gloria,
días de alegría y paz.
—
Siempre velaste mis sueños
y ahuyentaste mis miedos
por eso hoy te recuerdo
lo mucho que yo te quiero.
Eres más que un buen hermano,
buen amigo y compañero
y por ser tu cumpleaños
lo mejor yo te deseo.
—
Los dos juntos de la mano
compartimos nuestra vida
me ayudaste a levantarme
después de cada caída.
Que en este día especial
no te falte la alegría
te lo desea esta hermana
que la vida por ti daría.
—
Te recuerdo desde siempre
y siempre tú me has cuidado
nunca dejabas que nadie
me causase ningún daño.
Me gustaría pedirte
el día de tu cumpleaños
que no pierdas la sonrisa
que se dibuja en tus labios.
—
Felicidades, pequeño,
hoy es un día especial
y celebraremos juntos
esta bella y nueva edad.
Brindemos por otro año
lleno de felicidad
porque mi amor y cariño
jamás te van a faltar.
—
Si te miraba a los ojos
sabías que tenía miedo
y si lloraba de noche
venías a darme consuelo.
Por esos y otros motivos
este día es especial:
¡Felicidades, hermano!
hoy te toca disfrutar.
Goza de cada momento,
de cada instante de tu vida,
pues tu gran corazón merece
grandes dosis de alegría.
—
Aquellos días felices
jamás los podré olvidar
ni aquellos malos momentos
que nos unieron más.
Por eso yo te deseo
lo mejor en este día
que se cumplan hoy tus sueños
hermano del alma mía.
Hoy es un día especial
pues vamos a celebrar
que es el cumpleaños
del chico más especial:
de ese hermano al que nunca
yo dejaré de amar,
del chico más fabuloso
que te puedas encontrar.
Por nuestra infancia juntos,
por el amor de verdad,
por las risas y los lloros,
por las tardes junto al mar.
Te deseo hoy y siempre
la máxima felicidad
y para lo bueno y lo malo
a tu lado voy a estar.